





Son el eje central de las reglas.
Cada vez que los Jugadores intenten llevar a cabo cualquier tipo de acción que tenga consecuencias relevantes en la partida, tendrán que realizar una Tirada de Dificultad.
Y esta dificultad será determinada por el Máster, que se basará tanto en las habilidades de los personajes como en la situación a la que se enfrenten.
Cuanto más peligroso y complejo sea el reto a resolver y cuanto más arriesgadas y espectaculares sean las acciones que intenten los Jugadores, mayor será la dificultad de dichas tiradas.
En resumen, cuanto más te flipes, más difícil será que lo consigas.
Ahora bien, ¿qué tipo de acciones pueden intentar los Jugadores?
Pues básicamente lo que quieran.
¿¡LO QUE QUIERAN!?
Sí y no. Me explico:
En las Cartas de Personaje se describen las habilidades y poderes de estos, así como sus miedos y debilidades.
Y dichas descripciones son muy breves y poco precisas, dejando así mucho espacio para la libre interpretación.
De modo que los Jugadores podrán imaginar e intentar acometer cualquier acción que se les ocurra, siempre y cuando esté acorde con la descripción de su personaje.
En última instancia, el Máster será el encargado de decidir si lo que proponen los Jugadores es posible o no, y cómo de difícil es.
Tu Mago de Fuego no puede congelar cosas, asúmelo.
Estas tiradas se realizarán con un dado de 20 caras, por lo que la dificultad impuesta por el Máster tendrá que ser un número comprendido entre 2 y 20.
Y el objetivo de los Jugadores será el de igualar o superar este número.
Siendo 1 siempre un fallo y 20 siempre un acierto.
El Máster dice un número y tú tiras el dado para intentar superarlo.
Asimismo, las Tiradas de Dificultad que estén relacionadas con los miedos y debilidades de los personajes serán siempre números altos (es decir, difíciles), independientemente de que sean situaciones objetivamente fáciles para el resto de personajes.
Si tu Bárbaro de 200 kg tiene miedo a las alturas y está al borde de un precipicio, enfrentarse a un simple trasgo le resultará un reto casi imposible.
Esta tabla te servirá de guía a la hora de asignar dificultades:



"Inclinaos ante mi, patéticos mortales..."
Nagas

