





El ArchiDado Perdido es un juego de rol narrativo, basado en la improvisación y la libre interpretación de textos.
¡¿QUÉ?! Tranquilo, sigue leyendo...
Durante la partida, cada Jugador asume el rol de un personaje, mientras que el Máster es el encargado de dirigir y arbitrar la aventura, planteando las diferentes situaciones y desafíos a resolver, e interpretando al resto de personajes y criaturas que los Jugadores se encuentran.
Una partida de rol de toda la vida, vamos...
Tanto los personajes que interpretan los Jugadores como el resto de criaturas, objetos y elementos relevantes para la partida están representados por una carta.
Y en estas cartas, toda la información que aparece lo hace en forma de texto, sin ningún tipo de número, estadística o símbolo.
Y ahora es cuando viene el girito...
Mientras que en la mayoría de juegos de rol tradicionales, los ataques, hechizos, acciones y movimientos vienen descritos y acotados en el manual de reglas pertinente, y queda muy claro el efecto, alcance y duración de casi todo.
Haciendo uso para esto de gran cantidad de números, fórmulas y tablas.
Me da pereza solo de pensarlo...
En El ArchiDado, cada Jugador podrá intentar acometer cualquier acción que se le ocurra, siempre y cuando esté mínimamente relacionada con la descripción de su carta de personaje y el contexto de la situación planteada por el Máster.
Asimismo, el Máster podrá improvisar qué poderes y habilidades tienen los monstruos y enemigos, así como las cualidades de los objetos mágicos o cualquier tipo de desafío que quiera proponerles a los Jugadores.
Imaginación al poder, maldita sea...
Todas las situaciones se resolverán con una única tirada de dados, libre de modificadores o tablas.
Y será el Máster el que decida la dificultad de dicha tirada.
Siendo la dificultad un número a igualar o superar con tu dado.
Dados de 20 caras, que son los que más molan...
Obviamente, el juego tiene más mecánicas y detalles a tener en cuenta, pero a grandes rasgos este sería el funcionamiento de El ArchiDado.
En las siguientes páginas del reglamento se describen todas las mecánicas con gran lujo de detalles y ejemplos prácticos.
Sigue leyendo...
No sufras, la web también tiene una sección de vídeos tutoriales.



"La única regla es que no hay reglas..."
Wilbur Primero, Senescal de Wilburgo

